Dada su rica producción de mucílago, es emoliente y pectoral. Para tratar la angina y las afecciones de garganta, un remedio es poner a remojo sus hojas durante una noche en agua hervida conteniendo su mucílago para hacer gargarismos
Para curar el ántrax (no confundir con el carbunco), puede utilizarse en cataplasmas y, contra el resfriado y la tos, en infusión
Para tratar las infecciones por estafilococos en las uñas pueden utilizarse, asimismo, cataplasmas con sus hojas y raíces.